La actitud y la comunidad emprendedora van de la mano
- Escrito por Management Journal
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“Las habilidades del emprendedor se pueden aprender, ya que más que un rasgo del carácter es una conducta, una actitud; define al emprendedor como la persona capaz de intuir una oportunidad de negocio y poner en práctica acciones arduas, creativas, difíciles y arriesgadas, que terminan en la creación de una empresa o negocio”. Peter Drucker.
El emprendedor es una persona con determinadas actitudes, que puede contar con algunas habilidades y competencias. Una actitud se define como: “la predisposición a responder de manera consistente, a diversos aspectos de las personas, situaciones u objetos”. Se infiere la actitud de una persona por la forma como expresan sus creencias y sus sentimientos en base a su conducta. Las creencias son postulados basados en valores y experiencias del individuo. Se forman principalmente en base a sus antecedentes socioeconómicos y demás experiencias durante toda su vida. Son creencias aprendidas, por ejemplo: “persevera y vencerás”.
La forma de pensar de las personas provoca emociones que son sentimientos dirigidos a otras personas, cosas o situaciones. En una persona que tenga sentimientos positivos hacia la perseverancia, cuando las cosas no salen, su sentimiento naturalmente lo conduce a un comportamiento de perseverar.
Las actitudes se desarrollan como una representación de las personas y su entorno social. Se forman prototipos en la memoria de las personas que les permiten evaluar a priori individuos, situaciones u objetos y actuar en consecuencia.
Fuente: Gestiopolis.com