¿De qué se tratan los programas de incentivos laborales?

Los empleadores siempre están buscando maneras de motivar a los empleados y aumentar la productividad. Con este fin, los empleadores implementan programas de incentivos laborales. Estos programas de incentivos sirven como bonificaciones adicionales al pago de dinero estándar. Cuando un empleado cumple con las metas de productividad, el empleador lo recompensa con bonificaciones predeterminadas o con una compensación adicional.

Propósito

Los empleadores instituyen programas de incentivos laborales para motivar a los empleados. Los programas están diseñados para aumentar la productividad y fomentar la sana competencia. Con la promesa de una recompensa, los empleados teóricamente trabajan más duro, más eficientemente y con una mayor precisión para poder obtener los incentivos.

Cómo funcionan

La dirección conoce y establece los términos del programa. Crea el marco de tiempo del programa y, si es que los hay, los límites de los incentivos. A continuación, la administración hace que los empleados conozcan el programa.

Los métodos comunes para dar a conocer programas de incentivos son a través de memorandos entre oficinas, correos electrónicos y reuniones de personal. A los empleados se les dicen los términos y condiciones. Si un empleado cumple con los términos, la dirección lo recompensa con el incentivo.

Tipos

Los programas de incentivos varían en función del tipo, tamaño y necesidades de la empresa. Los incentivos de ventas son una de las variaciones más comunes. A un empleado se le da un objetivo, ya sea número o cantidad de ventas. Si el empleado cumple con este objetivo, es recompensado con un bono monetario. Otros tipos de incentivos incluyen vacaciones u otro tipo de tiempo libre pagado, reconocimiento en forma de certificados o premios (por ejemplo, el empleado del mes) o alguna forma de progresar dentro de la empresa.

Ventajas y desventajas

La mayor ventaja de un programa de incentivos laborales es aumentar la productividad o las ventas. Los empleados quieren cumplir con sus objetivos, por lo que trabajan más duro y con más precisión. La desventaja es que, sin una planificación adecuada, los incentivos pueden hacer más daño que bien. Si no es correctamente presupuestado y ejecutado, el costo adicional del programa puede contrarrestar el aumento del número de ventas.

Los empleadores también deben asegurarse de que las condiciones sean claras y sin margen para la interpretación. De lo contrario, la moral del empleado puede sufrir, lo que sería contrario al objetivo del programa.

Fuente:Ehow