¿Liderazgo femenino o masculino? ¿quiénes son más eficientes?

La visibilidad y el impacto que empezaron a tener las mujeres en cargos directivos a nivel mundial en los últimos 20 años han originado constantes investigaciones que intentan derrumbar los mitos y construir las realidades del tema.

Una de las preguntas cruciales es si existe, o no, una forma distinta de ejercer el liderazgo entre hombres y mujeres.

Algunos creen que sí e identifican la dirección horizontal, participativa y empática, como rasgos que distinguen a las mujeres. Otros prefieren no ponerle género al liderazgo y mejor hablar del talento y de la calidad para saber ejecutarlo.

En medio del debate, existen programas como Strategies for Leadership, Empowering Women Executives, del International Institute for Management Development (IMD) de Suiza. El programa ofrece educación ejecutiva para mujeres con un método genuino: la convivencia con caballos.

Las ejecutivas de alto nivel, con más de 10 años de experiencia, pagan u$s10.000 para mejorar su eficiencia como líderes. Deben guiar -no montar-a ese caballo por la ruta indicada, pero primero necesitan ganarse su confianza y poner en práctica lo que funciona, o no, en su estilo de liderazgo.

"La diferencia está en la forma en que se expresan", afirmó María del Carmen Bernal, directora del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección del IPADE.

"Uno de los mitos más frecuentes es creer que las mujeres son muy emocionales a la hora de tomar decisiones", señala Silvia Damiano, directora asociada de Programas para la División de Educación Ejecutiva de la Melbourne Business School, en Australia, y experta en neuroliderazgo y aprendizaje organizacional.

Hallazgos recientes de los neurocientíficos indican que, en situaciones normales, no hay diferencias significativas entre hombres y mujeres en la toma de decisiones. "Aunque ante situaciones de estrés, el hombre tiende a asumir más riesgos mientras que la mujer es más precavida", aseguró Damiano.

Otra discusión gira en torno a la tendencia maternalista de la gestión femenina. "Hay que evitarlo", advirtió Guadalupe Caso, ombudswoman financiera de banco Santander, quien lleva 50 años en el sector y ha ocupado varios puestos de dirección.

En contraste, Juan Ignacio Pérez, socio director de la consultora de gestión y liderazgo Heidrick & Struggles, consideró que no existen diferencias, pero sí estilos de liderazgos.

"Se dice que el estilo femenino es mejor y no es cierto", afirmó Pérez. "Lo que hay son liderazgos buenos o malos", agregó.

Recuerda el caso de Carly Fiorina y su paso por HP, en 2002, cuando se empeñó en la fusión con Compaq. "Tenía fama de dura y competente, pero no por ser mujer, sino porque su estilo era ése. Sin embargo tomó decisiones equivocadas. Así que es mejor hablar de resultados más que de géneros", opinó Pérez. Las ejecutivas que sacrificaron todo y oprimen a otras mujeres y a sus subordinados parecen estar en extinción.

"Fueron mujeres que llegaron a puestos de alta dirección porque aprendieron y desarrollaron un comportamiento y un estilo de liderazgo masculino, pensando que era el mejor camino para llegar a la cima", aseguró Carmen Bernal, del IPADE.

y agregó que "ahora, la tendencia es preparar y formar a las mujeres que tienen talento para que aprendan a dirigir, tomar decisiones y sepan relacionarse con hombres y mujeres".

Las mujeres que se comportan como "abejas reinas" responden a patrones de género ancestrales en los que una mujer no es empática con las otras.

"Hemos vivido en el espacio de las idénticas", afirmó Ximena Andión, directora del Instituto de Liderazgo Simone de Beauvoir. "No sabemos aceptar la jerarquía femenina porque actuamos con la lógica de que todas somos iguales".

Los optimistas consideran que las nuevas generaciones de ejecutivas poco a poco revierten este comportamiento.

"Las mujeres jóvenes tienen otra mentalidad", comentó Ignacio Pérez y agregó que "ahora vemos una diversidad de foros e informes internacionales que proponen iniciativas para el incremento de las mujeres en las direcciones y en los consejos de administración".

Fuente:Iprofesional