fbpx
Logo

10 razones por las que los empleados pueden odiar a su jefe

razones por las que los empleados pueden odiar a su jefeEn el mundo de los Recursos Humanos, un buen jefe se diferencia de un mal jefe por la forma en que hace que se sientan sus empleados.

Además los propios trabajadores también evalúan a su superior por su capacidad, o falta de ella, para realizar su trabajo con éxito, lo que influirá muy significativamente en la opinión que tienen de él o ella.

He aquí diez comportamientos sugeridos por el portal About.com que si realiza un gerente, muy probablemente sus empleados le tengan manía.

1. No saber lo que hace

Muy básico pero muy frecuente. Personas que no son lo suficientemente competentes en su trabajo, y la mayor desconsideración es hacer ver que sí ante sus trabajadores. Los jefes de un equipo tienen que ser capaces de visualizar los objetivos más allá de los descritos, y conseguir que el talento de sus miembros se maximice ejerciendo su poder de líder.

2. Tratar irrespetuosamente a los subordinados

Demostrar una falta de respeto es lastimar los sentimientos y la confianza de aquellos que trabajan para un superior, pero sobretodo, es descartar cualquier posibilidad de que los propios empleados le tengan el debido respeto al jefe. No se pueden menospreciar las propuestas, por ridículas que parezcan, ni criticar de manera injusta. En este punto también entran aspectos más terrenales como denegar unas vacaciones merecidas o poner reuniones a última hora de la tarde.

3. Creer que todo el trabajo gira alrededor del jefe

Porque aunque tenga un peso importante en el equipo, los miembros no piensan, y menos mal, que toda su vida laboral empiece y termine en su jefe. Se relacionan con otros departamentos, con otros compañeros y con otros jefes por los que tienen una visión mucho más amplia. Esto también significa no castigarse en exceso por los errores cometidos con miembros del equipo y mucho menos hacerse demasiada publicidad de los aciertos.

Si un líder gestiona correctamente su equipo, cada vez necesitará dar menos órdenes y menos orientaciones, a excepción de los nuevos empleados.

4. Ser un tirano

Porque aunque no vivan solo por esto, las decisiones del responsable tienen un impacto importante en la vida de los trabajadores, así que lo mejor es razonarlas al máximo y dejarse aconsejar por ellos mismos en aspectos que conocen más que el propio responsable. Esto no significa no utilizar la posición de superior para imponer un convencimiento en un momento dado, pero tiene que estar justificado. Justo al contrario de ‘Porque lo digo yo'.

5. Incrementar las órdenes

Si uno gestiona correctamente su equipo, cada vez necesitará dar menos órdenes y menos orientaciones, a excepción de los nuevos empleados claro está. Si un jefe tiene la necesidad de dar cada vez más órdenes, es que ha hecho mal su trabajo, y además lo está dificultando a sus empleados.

6. No saber lo que hacen ellos

Es casi peor que no saber lo que se hace uno mismo. Aunque tienen que ser autónomos para poder realizar su trabajo regularmente, el superior también tiene que saber qué proyectos lleva cada miembro, para hacer su seguimiento, para distribuir las cargas de trabajo y para tomar las decisiones correspondientes.

7. Actuar como si no tuvieran vida fuera del trabajo

La mayoría de empleados quieren hacer bien su trabajo, pero precisamente por ello se sienten con derecho a hacer lo mismo con su vida laboral. Muy lejos queda la idea de que los que trabajan hasta tarde, trabajan más. Es el propio jefe el que tiene que asegurarse de que pueden conciliar su trabajo con su familia, sus amigos, o lo que ellos decidan fuera de su horario.

8. No dar el reconocimiento merecido

A todos nos gusta que nos reconozcan el trabajo bien hecho, ya sea los compañeros, el jefe o aun mejor, el jefe del jefe. Así que si manejamos un equipo y alguien destaca por sus logros, tenemos que buscar la manera de recompensárselo. Es la clave para mantener al equipo motivado.

9. Traicionar a los empleados

Nunca, nunca, nunca, sea en la situación que sea. Porque no solo ese trabajador jamás volverá a confiar en su superior, sino que hará que el resto de trabajadores tampoco lo haga. Además, tampoco los jefes del jefe en cuestión verán con buenos ojos que arrolle a sus empleados. En conclusión, problemas en la carrera del jefe en cuestión.

10. No tener un comportamiento ejemplar

El equipo tiene que ver en su líder un ejemplo de buen comportamiento y de desarrollo profesional. El mal comportamiento del jefe dará carta blanca a los empleados para que hagan lo mismo quizás no con él, pero seguro entre sus compañeros. Así que un jefe debería comportarse siempre como le gustaría que lo hicieran sus empleados.

Estos diez comportamientos descritos son inaceptables para un líder, pero ocurren a diario en distintos lugares del mundo. Sin embargo, y a pesar del entorno cada vez más competitivo, tarde o temprano se les acaba pillando y su carrera profesional se resiente para siempre. Si tiene empleados a su cargo, esta es una buena guía sobre cómo tratarlos y como tratarse mejor a usted mismo.

Fuente:Iprofesional

      © Management Journal Online. All rights reserved