Para los líderes europeos sólo se sale con ajustes

La política de ajustes de la Unión Europea no da frutos. El desempleo rompe récords, las protestas se repiten en las calles y el bloque entra en recesión. Así que los dirigentes de la UE cerraron ayer una cumbre de 2 días hablando de “crecimiento y competitividad”. Fueron sólo palabras que no impiden que la apuesta siga siendo, con Alemania marcando el ritmo, más ajustes.

Todo el bloque excepto el Reino Unido y la República Checa, firmaron ayer un “Tratado de Estabilidad, Coordinación y Gobernanza de la Unión Económica”.

La UE es especialista en los eufemismos y ese nombre tapa un documento centrado en los ajustes, que prohíbe políticas expansionistas y obliga a cambiar las constituciones – como hicieron Alemania y España- para imponer la “regla de oro”, una ley que diga que el déficit no puede pasar del 0,5%.

Pocos gobiernos creen en las virtudes del nuevo tratado. Pero todos firman porque ni siquiera está claro que llegue a entrar algún día en vigor -Irlanda lo ratificará en referéndum y el candidato socialista a las presidenciales francesas, François Hollande, advirtió que lo renegociará- y porque saben que es una concesión a Angela Merkel. Si un país no cumple con la reducción de déficit podría ser llevado por otro país ante la Justicia europea. Pero nadie se imagina a Merkel pidiendo a los tribunales imponer una multa a Francia.

Fuente: Clarín.com